Israel y Palestina: ¿quién tiene razón?
- Zona Gris
- 28 oct 2023
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¿Alguna vez has presenciado un debate en el que ambas partes estén tan convencidas de su verdad que la posibilidad de un acuerdo parece inalcanzable? El conflicto entre Israel y Palestina puede recordarnos precisamente a ese tipo de debates. Ambas partes tienen su historia, sus argumentos y sus verdades. Pero ¿es posible determinar quién tiene razón cuando se trata de una cuestión tan compleja y enraizada en décadas de historia conflictiva?
Analicemos las dos posturas, comenzando por los argumentos a favor de Israel:
1. Autodefensa y seguridad
Desde su creación en 1948, Israel ha vivido en un estado de constante alerta. Rodeado de naciones que en varias ocasiones han declarado su intención de eliminarlo, Israel ha tenido que luchar por su supervivencia desde el principio. Ha enfrentado guerras a gran escala, como la Guerra de los Seis Días en 1967 y la Guerra de Yom Kippur en 1973, así como constantes ataques terroristas y hostigamiento a lo largo de sus fronteras. En este escenario, argumentan los defensores de Israel, el estado judío tiene tanto derecho a defenderse y garantizar la seguridad de su pueblo como cualquier otra nación.
Esto se refuerza con la naturaleza misma del derecho internacional, que reconoce el derecho inherentemente legítimo de un estado a proteger a su población y su territorio contra amenazas externas. Además, la autodefensa no se limita a repeler un ataque en curso, sino que también puede prevenir un ataque inminente.
Pero, ¿dónde se traza la línea entre la autodefensa y la agresión? ¿Cómo se equilibra el derecho de un estado a protegerse con los derechos humanos y las necesidades humanitarias de aquellos que se ven atrapados en el fuego cruzado? ¿Cómo se garantiza que las acciones defensivas no se conviertan en medidas ofensivas que amplíen el ciclo de violencia y hostilidad?
2. El legado del Holocausto
La sombra del Holocausto, donde seis millones de judíos fueron sistemáticamente asesinados durante la Segunda Guerra Mundial, ha tenido un peso significativo en la creación y percepción del estado de Israel. La creación de un hogar seguro y soberano para el pueblo judío era vista como una necesidad moral y humanitaria en el escenario global de la posguerra.
El recuerdo del genocidio ha sido un factor fundamental para entender la determinación de Israel de mantener su seguridad y soberanía. En este sentido, uno podría argumentar que el Holocausto justifica la existencia de un estado judío donde puedan vivir seguros, dado el histórico antisemitismo y la persecución que los judíos han sufrido durante siglos en todo el mundo.
No obstante, este argumento también plantea interrogantes. ¿Justifica la necesidad de seguridad de un grupo la subyugación o el desplazamiento de otro? ¿Cómo se equilibran las cicatrices del pasado con las necesidades y aspiraciones del presente? ¿Cómo se reconcilia la creación de un hogar seguro para un pueblo con la creación de un hogar inseguro para otro?
3. Reclamo histórico
Los judíos mantienen un vínculo histórico con la tierra que hoy es Israel. Este vínculo se remonta a más de 3000 años, cuando el reino de Israel se estableció en la región. A lo largo de la historia, aunque los judíos han sido expulsados y dispersados en numerosas ocasiones, siempre han mantenido la conexión con su tierra ancestral y la aspiración de regresar a ella.
Este argumento se basa en la premisa de que la historia confiere derechos. Que el hecho de que un grupo haya habitado una región en algún momento de la historia le da un derecho legítimo a la soberanía sobre esa región. En este caso, los defensores de Israel argumentan que la larga e ininterrumpida conexión del pueblo judío con la tierra de Israel justifica su reclamo de soberanía.
Sin embargo, este argumento también tiene sus desafíos. Por un lado, si aceptamos que los derechos históricos confieren derechos modernos, nos encontramos en un terreno peligroso. Después de todo, los mapas del mundo han cambiado drásticamente a lo largo de los siglos, y muchas naciones podrían reclamar derechos sobre territorios en base a la historia.
Por otro lado, ¿qué sucede con los derechos de aquellos que habitaron la tierra en los períodos intermedios? En el caso de Israel y Palestina, ¿qué sucede con los derechos de los palestinos, que también tienen una larga historia en la misma tierra?
Ahora, veamos los argumentos a favor de Palestina:
1. Derechos humanos y ocupación
Los palestinos viven actualmente bajo lo que muchos describen como una ocupación militar. Las restricciones a la libertad de movimiento, la expansión de los asentamientos israelíes en Cisjordania, la demolición de hogares palestinos y la detención de palestinos, entre otras acciones, han sido señaladas por organizaciones de derechos humanos y por la comunidad internacional como violaciones a los derechos humanos.
Los defensores de Palestina argumentan que ninguna nación debería ser capaz de negar a otro grupo sus derechos fundamentales para la seguridad, la libertad y la autodeterminación. En este sentido, argumentan que los palestinos tienen el derecho de vivir libremente en su propia tierra, sin la constante amenaza de la violencia y la opresión.
Sin embargo, este argumento también plantea cuestionamientos. ¿Qué significa "su" tierra en una región con una historia tan complicada y disputada? ¿Cómo se equilibra el derecho de un grupo a la autodeterminación con el derecho de otro grupo a la seguridad? ¿Cómo se garantiza que la lucha por los derechos humanos no se convierta en un pretexto para la violencia y la hostilidad?
2. Derecho al retorno
Durante la guerra de 1948, que siguió a la creación del estado de Israel, se estima que entre 700,000 y 900,000 palestinos fueron desplazados de sus hogares. Muchos de ellos y sus descendientes, que ahora suman millones, todavía viven en campamentos de refugiados en países vecinos.
La Resolución 194 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, adoptada en 1948, establece que los refugiados que deseen regresar a sus hogares y vivir en paz con sus vecinos deberían poder hacerlo lo antes posible. Esto se ha interpretado como el reconocimiento del "derecho al retorno" de los refugiados palestinos.
Los defensores de Palestina argumentan que este derecho al retorno es fundamental para resolver el conflicto. Sin embargo, para Israel, la implementación del derecho al retorno representaría un desafío demográfico significativo y podría poner en peligro su carácter como estado judío.
Además, este argumento plantea preguntas sobre cómo se determina quién es un refugiado, cómo se manejaría el retorno de millones de personas a una región ya densamente poblada y cómo se reconciliaría el derecho al retorno con los derechos de aquellos que ahora viven en las áreas de las que los refugiados palestinos fueron desplazados.
3. Autodeterminación
La autodeterminación es un principio fundamental del derecho internacional, que sostiene que los pueblos tienen el derecho a decidir libremente su estatus político y su forma de desarrollo económico, social y cultural. Los palestinos, al igual que cualquier otro pueblo, tienen este derecho.
Los defensores de la causa palestina argumentan que la ocupación de Israel ha negado a los palestinos este derecho fundamental. Alegan que los palestinos viven bajo un sistema que les niega derechos básicos y oportunidades de desarrollo, y que solo un estado palestino independiente puede garantizar estos derechos y oportunidades.
Al mismo tiempo, esta visión plantea ciertas preguntas. ¿Cómo se define un "pueblo" en el sentido del derecho a la autodeterminación? ¿Cómo se equilibra el derecho a la autodeterminación con otros derechos e intereses, como la seguridad nacional? ¿Cómo se establece un estado palestino independiente sin poner en peligro la existencia de Israel?
Además, la creación de un estado palestino plantea su propia serie de desafíos, desde la definición de sus fronteras hasta la organización de su gobierno y economía. A pesar de estas complicaciones, el derecho a la autodeterminación es un principio clave que debe ser respetado y tenido en cuenta en cualquier discusión sobre el futuro de Israel y Palestina.
Conclusión
El dilema de quién tiene razón en el conflicto entre Israel y Palestina es complejo y profundo. Hay que comprender tanto la necesidad de garantizar la seguridad y la soberanía de Israel como las aspiraciones legítimas de los palestinos a la autodeterminación y la libertad. La comprensión de este delicado equilibrio es clave para avanzar hacia una solución justa y duradera para todas las partes en el conflicto.
Como has podido comprobar, cada parte tiene su verdad, y ambas están fundamentadas.
Ahora te pregunto a ti, ¿qué piensas? ¿Es posible determinar quién tiene razón en este conflicto? O mejor aún, ¿cómo podemos superar esta pregunta y buscar soluciones que conduzcan a la paz y la justicia? Te invito a compartir tus reflexiones y perspectivas en los comentarios.
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